5 Beneficios de cambiar el tubo de escape
Cambiar el tubo de escape es una tarea de mantenimiento que se debe realizar cada cierto kilometraje. Y también si hay algún deterioro en el mismo. Las funciones del tubo de escape son muy importantes y sustituir el tubo cuando es necesario es esencial.
Vamos a ver cuáles son los beneficios de cambiar el tubo de escape de un vehículo y cuando se debe hacer.
¿Cuáles son los beneficios de cambiar el tubo de escape?
- Mejor experiencia de conducción, más fina, suave, sin traqueteos.
- Reducción del ruido.
- Aumento de la potencia del vehículo y un mejor rendimiento del motor gracias a la optimización del flujo de gases.
- Emisión de contaminantes más reducida. El cumplimiento de la normativa de emisión es esencial para pasar la ITV y para no ser multado si hay un control sobre esta cuestión en carretera.
- Menor consumo de combustible.
Queda claro que cambiando el tubo de escape se consiguen importantes beneficios.
¿Por qué cambiar el tubo de escape? Señales que piden su sustitución.
- Porque tiene 80.000 kilómetros o más y ha llegado al final de su vida útil según la recomendación del fabricante.
- Ha sufrido daños en un accidente.
- Presenta signos de deterioro.
- Durante la conducción se detectan signos que alertan en la conveniencia de sustituir el sistema de escape de un vehículo.
- Ha superado los límites legales de emisión de gases y/o de decibelios debido al deterioro del tubo de escape o de la unión de este con el silenciador.
¿Cómo saber si el tubo de escape está roto?
Permanecer alerta a los signos de deterioro es clave para sospechar que ha llegado el momento de sustituir el tubo de escape.
- Pérdida de potencia del vehículo a la vez que aumenta el consumo de combustible
- Olor a gases de escape en el interior del vehículo
- El motor hace más ruido a un mayor volumen de lo normal.
- Conducción incómoda con traqueteo o vibraciones extrañas
- Exceso de agua acumulada en el tubo de escape en trayectos cortos, no achacable a la lógica condensación.
¿Cómo saber si el tubo de escape está bien?
La forma más sencilla y directa es procediendo a su inspección.
Puedes comprobar tú mismo o contratar ayuda profesional. Es necesario verificar si la línea completa del tubo y el silenciador presenta perforaciones, agujeros o marcas evidentes de desgaste en algunos puntos.
¿Cuánto cuesta cambiar el tubo de escape de un vehículo?
La suma del precio de la pieza y la tarifa de la mano de obra por el tiempo empleado en realizar la sustitución. La media es de entre 200 y 500 euros, dependiendo del modelo y marca.
¿Qué pasa si no tengo tubo de escape?
La potencia del vehículo y el rendimiento del motor se verán afectadas. La conducción será molesta y ruidosa. Las emisiones de gases serán exageradas y tu vehículo necesitará más combustible para un mismo trayecto que si dispusieras de tubo de escape.
Además si la autoridad detecta que conduces sin tubo de escape te multará. Las sanciones son muy elevadas.
A todo esto hay que añadir que nunca pasarás la ITV en un vehículo sin tubo de escape o con este en malas condiciones.
¿Qué se elimina por el tubo de escape?
Gases como el dióxido de carbono (CO2) y el óxido de nitrógeno, además de vapor de agua y otras sustancias. Mantener el catalizador en buen estado es clave para reducir la emisión de gases peligrosos al exterior.
¿Puedo pasar la ITV si tengo el tubo de escape picado?
No si el nivel de deterioro implica una emisión de contaminantes mayor a lo autorizado legalmente o si el sistema de escape deteriorado provoca un nivel de ruido superior al legalmente permitido.